EMERGENCIAS NEONATALES
El termino neonato se refiere
a un bebe dentro de los primeros 28 días después del nacimiento, para brindarle
atención a los neonatos se necesita intervenciones adicionales de atención
especializada; ya que aproximadamente 4 de cada 10 neonatos nacen con
complicaciones aumentando el bajo peso al nacer y disminuyendo la edad
gestacional. Debido a la problemática que se presenta es por eso que es
necesario se tengan los conocimientos de cómo atenderlos y las unidades cuenten con el equipo necesario
y adecuado. En el mundo al año el 8% de los neonatos nacen pesando menos de
1550gr y la mayoría requiere reanimación.
Existen dos tipos de riesgo
para que esto ocurra:
Factores de riesgo Pre-parto
·
Embarazo múltiple
·
Embarazo adolescente
·
Eclampsia
·
Diabetes gestacional
·
Poli, Oligo hidramnios
·
|RPM
Factores
de riesgo Intraparto
·
Prematurez
·
RPM <18 horas antes del parto
·
Prolapso del cordón
·
Placenta previa
Después del parto del recién
nacido es indispensable la valoración con la escala APGAR que ayuda a registrar
el estado del recién nacido en los primeros minutos de la vida con base a cinco
signos.
A cada signo se le estipula una puntuación del 0 al 2, la
calificación de apgar se otorga sumando los puntos y se registra al minuto y a
los cinco minutos de nacido.
ALGORITMO DE LA REANIMACIÓN NEONATAL
Los prolapsos iniciales para
una reanimación neonatal son:
·
Via aérea
·
Respiración
·
Circulación
Para iniciar una reanimación
neonatal hay que tomar en cuenta los siguientes aspectos Termorregulación,
Posición (husmear), Permeabilidad de las via aéreas (Aspiración de
secreciones), secado y estimulación.
Pasos para la reanimación
neonatal:
1.
Provisión de oxigeno suplementario
2.
Asistencia de ventilación mediante presión
positiva
3.
Intubación
4.
Compresiones torácicas
5.
Administración de medicamentos
La reanimación de recién
nacidos de 35 sem o más de gestación se debe comenzar con una fracción
inspirada de oxígeno (FiO2) de 0,21, es decir, con aire ambiental.
La reanimación de recién nacidos de menos de 35 sem se debe comenzar con una
FiO2 de 0,21 a 0,3.
Si el recién nacido está
respirando oxígeno adicional, pero la saturación de oxígeno (SpO2)
no está dentro del rango esperado, se puede administrar oxígeno a flujo libre
empezando con una FiO2 de 0,3. Se debe ajustar el flujómetro a
10 L/min. Si se dispone de un mezclador de oxígeno y aire, se va a ajustar la
concentración de oxígeno a lo que se necesite para conseguir que la SpO2 esté
dentro del rango esperado para la edad del neonato.
Si el recién nacido tiene
respiración agitada, o no puede mantener la SpO2 a pesar de dar
oxígeno a flujo libre al 100 %, se debe considerar una prueba con presión
positiva continua en la vía aérea (CPAP).
Ventilación con presión
positiva
Después de completar los
pasos iniciales de reanimación, estaría indicado administrar VVP si el recién
nacido está con jadeo, apnea o si la frecuencia cardiaca es menor de 100
lat/min. Si el recién nacido está respirando, y la frecuencia cardiaca es más
de 100 lat/min, pero la SpO2 no se puede mantener dentro del
rango esperado a pesar de dar oxígeno a flujo libre o CPAP, se puede considerar
probar con VPP, para colocar VPP se debe ajustar el flujómetro a 10 L/min.
Cuando se utiliza VPP hay
que considerar usar un monitor electrónico para evaluar la frecuencia cardiaca
de forma fiable, ya que el indicador más importante de que la VPP está siendo
eficaz es el aumento de la frecuencia cardiaca. Si la frecuencia cardiaca no se
eleva, se debe valorar si la VPP expande los pulmones, lo que se evidencia si
el tórax se mueve con la ventilación. Después de intubar -o de insertar una
máscara laríngea- se puede evaluar si los pulmones se expanden observando los
movimientos torácicos y por la auscultación bilateral del murmullo vesicular en
el curso la ventilación.
Si el recién nacido no
mejora y el tórax no se mueve a pesar de haberse hecho todos los pasos para
corregir la ventilación, incluyendo intubación, esto puede deberse a que la
tráquea esté obstruida con secreciones espesas. Por eso, se recomienda aspirar
bien la tráquea usando un catéter de succión que se insertará a través de tubo
endotraqueal, o también puede hacerse directamente con un dispositivo para la
aspiración del meconio.
Intubación endotraqueal y
máscara laríngea
Se recomienda intubar antes
de empezar el masaje cardiaco. Si la intubación no es exitosa o factible, se
puede usar una máscara laríngea.
La marca guía de las cuerdas
vocales en el tubo endotraqueal es solo una aproximación, y puede que no
indique de modo confiable la posición correcta. La medida desde la punta del
tubo a los labios, o la profundidad del tubo endotraqueal, se debe determinar
usando la tabla Medida de Inserción del Tubo Endotraqueal, o midiendo la
longitud que existe entre el puente nasal y el trago de la oreja.
Masaje cardiaco
Está indicado cuando la
frecuencia cardiaca es menos de 60 lat/min, y después de por lo menos 30 s de
una VPP que expanda los pulmones, evidenciado esto por los movimientos del
tórax con la ventilación. En la mayoría de los casos se debe de haber dado por
lo menos 30 s de ventilación a través de un tubo endotraqueal adecuadamente
introducido, o de una máscara laríngea.
El masaje cardiaco se administrará
con la técnica de los dos pulgares. Una vez que el tubo endotraqueal o máscara
laríngea se ha asegurado, la persona que realiza el masaje cardiaco debe
hacerlo desde la cabecera del recién nacido, en tanto que la persona encargada
de la ventilación a través del tubo endotraqueal se desplazará a un lado, para
facilitar el acceso a la que está realizando el masaje cardiaco, se debe
utilizar un monitor electrónico ya que es el método preferido para evaluar la
frecuencia cardiaca durante el masaje cardiaco.
El masaje cardiaco se debe
mantener por 60 s antes de volver a comprobar la frecuencia cardiaca, cuando
esta se verifica por la auscultación.
INTERVENCIONES
FARMACOLÓGICAS
Acceso
vascular
El catéter umbilical es la
vía preferida para obtener acceso vascular urgente, pero la vía intraósea es
una alternativa razonable. Toda la medicación y líquidos que se pueden infundir
a través del catéter venoso umbilical, pueden ser infundidos a través de una
vía intraósea en neonatos a término y pre término.
Bradicardia
La epinefrina está indicada
si la frecuencia cardiaca del recién nacido es menor de 60 lat/min, después de
30 s de ventilación con una presión positiva que expanda los pulmones,
preferiblemente a través de un tubo endotraqueal adecuadamente introducido o
mascara laríngea, y después de 60 s de masaje cardiaco coordinado con la VVP,
usando oxígeno al 100 %. La epinefrina no está indicada antes de haberse
logrado una ventilación que expanda los pulmones de modo efectivo.
Se puede considerar una dosis
endotraqueal de epinefrina, mientras se consigue el acceso intravascular. Si la
primera dosis se da a través del tubo endotraqueal y la respuesta no es
satisfactoria, se puede repetir la dosis, que se debe de dar tan pronto como se
obtenga el acceso con catéter venoso umbilical, o por vía intraósea de
urgencia. No es necesario esperar 3-5 min después de la dosis endotraqueal.
Dosis Endotraqueal 0.5ML a 1ML / kg
Dosis IV 0.1 a 0.3 ML /kg seguido por 0.5 a 1ML se SF para
limpiar.
Hipovolemia
La solución que se
recomienda para tratar adecuadamente la hipovolemia es una solución de cloruro
de sodio al 0,9 % (suero fisiológico), o sangre O Rh-negativa. No se recomienda
más usar lactato de Ringer para tratar la hipovolemia.
Acidosis
El bicarbonato de sodio no
se debe de dar de forma rutinaria a los recién nacidos con acidosis metabólica,
pues no existe suficiente evidencia para apoyar esta práctica. Lo indicado es
ministrar 10ml/kg de solución fisiológica ayuda a mejorar la perfusión y la eliminación del ácido.
Depresión respiratoria
No hay suficiente evidencia
para evaluar la seguridad y eficacia de administrar naloxona a un recién nacido
con depresión respiratoria, debido a que la madre ha estado expuesta a
opioides. En estudios en animales y casos reportados se citan complicaciones
debidas a naloxona, que incluyen edema pulmonar, paro cardiorrespiratorio y
convulsiones.
Hipoglucemia
Los síntomas neurológicos constan de
agitación, disminución de la respuesta a estímulos, hipotonia. Apnea y
convulsiones. Obtenga los signos vitales basales del recién nacido y las
lecturas de saturación de oxígeno, y provea oxígeno adicional, ventilación
asistida, sostén de la tensión arterial por vía IV, según sea necesario. Se
puede administrar una solución de glucosa al 10 % en dosis súbita IV (2 mL/kg)
si la concentración de glucosa sanguínea del recién nacido es menor de 40
mg/dL, con una revisión de la concentración casi 30 min después.
Neumotórax
Puede
ocurrir neumotórax si un neonato inhala meconio al nacer, si el pulmón está
debilitado por una infección o si se requiere VPP. Si un recién nacido presenta
signos de neumotorax significativo, insuficiencia respiratoria grave que no
responde a VPP o disminución unilateral de los ruidos cardiacos y (si el
neumotorax está en el lado izquierdo) desviación de los ruidos cardiacos, puede
ser necesaria una evacuación del neumotorax con aguja.
Realice
asepsia con alcohol en la zona alrededor del segundo espacio intercostal, en la
línea media clavicular. Prepare el equipo necesario: una aguja en mariposa de
calibre 22 con un tubo de extensión, una llave de 3 vías y una jeringa de 20
mL: palpe el borde superior de una segunda costilla e inserte una aguja por
arriba, mientras un segundo proveedor jala el émbolo de la jeringa. Los nervios
y vasos sanguíneos trascurren debajo de las costillas, por lo que se debe
evitar puncionar esa zona. Continúe avanzando con lentitud la aguja hasta que
se obtenga aire. La aguja con aletas o “palomita" es rígida, por lo que se
debe ser lo suficientemente cauteloso para evitar un mayor desgarro pulmonar.
Si la jeringa de 20 mL se llena de aire, gire la llave de 3 vías en dirección
contraria a recién nacido, expulse el aire de la jeringa, abra de nuevo la
llave hacia el recién nacido, y continúe extra)endo aire. Una vez que ya no se
pueda obtener aire, retire la aguja, Si hay un escape de aire sintomático
constante, se puede insertar un catéter de calibre 2 2 en una localización
similar, retirar la aguja de introducción y acoplar el catéter al tubo de
extensión.
Insuficiencia
respiratoria y cianosis
Estos trastornos ocurren mas
frecuentemente en aquellos menores de 30 semanas de gestación o con peso
inferior a 1 200 g. Las causas respiratorias incluyen obstrucción de la vía
aérea, aspiración (meconio, líquido amniótico, sangre materna en el parlo,
reflujo gastro esofagico, cuerpo extraño), neumonía, neumotorax, fístula
traqueo esofágica, hernia diafragmática congénita o inmadurez pulmonar.
El tratamiento es establecer
la permeabilidad de la vía aérea asegurar un aporte adecuado de oxígeno
mediante su provisión complementaria, si se requiere, establecer una
ventilación eficaz que incluya VPP, según se requiera y asegurar una
circulación adecuada con compresiones torácicas si persiste la bradicardia
menor de 60 latidos/min, una vez que se han establecido la ventilación adecuada
y el apone de oxígeno suplementario.
BIBLIOGRAFIA.
•
AAOS. (2014).
Programa De Formación Profesional Del Paramedico. Primera Edición. Estados
Unidos de America: Intersistemas.
•
AAOS. (2011).
Los Cuidados de Urgencias y el Transporte de los Enfermos y Heridos. Novena
Edición Estados Unidos de America: Intersistemas
·
AAOS. (2018). Critical Care Transport. Segunda
Edición. Estados Unidos de America: Intersistemas
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